HA QUEDADO DEMOSTRADO QUE POR LA VÍA INSTITUCIONAL EL CAMBIO QUE REQUIERE EL PAÍS NO SERÁ POSIBLE, YA QUE LA PRIANdilla TIENE SECUESTRADO AL ESTADO Y POR ENDE A TODAS LAS INSTITUCIONES.

NO TENEMOS OTRA ALTERNATIVA QUE PROMOVER LA DESOBEDIENCIA CIVIL PACÍFICA ANTE EL GOBIERNO DICTATORIAL Y TIRANO QUE NOS DESGOBIERNA

LAS COSAS BUENAS Y LAS COSAS MALAS
NO SUCEDEN SOLO PORQUE SI,
TAMPOCO SUCEDEN POR ARTE DE MAGIA,
O HECHAS POR MANOS INVISIBLES.

EL 1 DE MAYO SERÁ EL DÍA QUE INICIE LA LIBERACIÓN DE MÉXICO POR LA VÍA DE LA DESOBEDIENCIA CIVIL PACÍFICA.

"EL PUEBLO UNIDO JAMÁS SERÁ VENCIDO"

martes, 21 de julio de 2009

El Renacimiento de México

El discurso de la primera Asamblea de la CND
16 de septiembre de 2006

La Abolición de un Régimen de Privilegios

En la primera parte de su discurso, López Obrador deja en claro que la decisión de continuar la lucha social por el camino de la CND, el FAP y el Gobierno Legítimo, se debe no solamente al fraude electoral, sino también a la crisis política que vive México desde la Presidencia de Salinas de Gortari.

Andrés Manuel López Obrador, señala que el proyecto salinista convirtió al gobierno en un comité al servicio de banqueros, hombres de negocios, especuladores, traficantes de influencias y políticos corruptos, es decir, colocó al Estado Mexicano al servicio de una oligarquía, que ha antepuesto los intereses financieros sobre las demandas sociales y el interés público.

Derivado de lo anterior, el Presidente Legítimo, establece que la CND, tomando como fundamento el artículo 39 Constitucional (el derecho a la revolución), ha decidido romper con el régimen de privilegios para así recuperar nuestra soberanía y emprender el camino para la construcción de una Nueva República.

Posteriormente, hace un recuento de las situaciones que el movimiento obradorista rechaza, que son: la explotación infantil, la violación de los derechos de las mujeres, la discriminación en todas sus formas, la privatización de la educación, la falta de empleo, la violación sistemática de los derechos laborales, los monopolios de particulares, la privatización de la industria energética, el FOBAPROA, la corrupción imperante en el gobierno, el abandono del campo, la libre importación de Maíz y Frijol prevista en el TLACAN, la competencia desleal que sufren los productores nacionales frente a los extranjeros, la depredación de nuestros recursos naturales, la manipulación de los medios de comunicación, el autoritarismo, la represión y la violación de los derechos humanos, así como la resignación a padecer todas estas injusticias.

La Nueva República

Por lo que toca a este aspecto, López obrador precisa que se trata de establecer un Estado de Bienestar que garantice el derecho a la alimentación, trabajo, salud, seguridad social, educación y vivienda, además, señala como base de una sociedad más justa la democracia y la defensa de la soberanía nacional. Asimismo, el objetivo de la Nueva República, debe ser la felicidad y la cultura de los mexicanos.

También reitera su rechazo a la corrupción, el influyentismo y la impunidad de la vida pública, por lo cual se hace necesario contruir un nuevo régimen legal, es decir establecer una nueva Constitución, que permita que las instituciones realmente estén al servicio de la mayoría, aunque por supuesto, hace énfasis en que primero se ayudará a los pobres.

Es relevante, que en esta parte de su discurso hace referencia a que el movimiento obradorista pugnará por el cumplimiento de los Acuerdos de San Andrés Larrainzar, que como sabemos, conllevan la satisfacción de las demandas de justicia, igualdad y llibertad de los pueblos indígenas.

La piedra angular de los activistas

En este apartado viene una serie de consejos que Andrés Manuel López Obrador da a los activistas del movimiento que encabeza, y que debido a su relevancia, transcribo de manera textual:

“Primero. No caer en la violencia, evadir el acoso y mantener nuestro movimiento siempre en el marco de la resistencia civil pacífica.

Segundo. No transar, no vendernos, no caer en el juego de siempre, de la compra de lealtades y conciencias disfrazada de negociación.

Tercero. Tenemos que luchar con imaginación y talento para el romper el cerco informativo y crear mecanismos alternativos de comunicación. Tenemos que hacer posible que la verdad se abra paso y llegue hasta el último rincón de nuestra patria.

Cómo puede observarse, engloban la filosofía de la no violencia, la congruencia de principios y la firmeza de las convicciones, así como la necesidad de contrarrestar la manipulación de la información de las televisoras.

El FAP

En cuanto al Frente Amplio Progresista, la idea general que se tiene en la población pero también entre muchos activistas y luchadores sociales, es que solamente engloba a los 3 partidos políticos que formaron la Coalición por el Bien de Todos que postuló a López Obrador como candidato a la Presidencia de la República. Sin embargo, es momento de aclarar con las propias palabras del López Obrador, que también se pueden sumar al FAP organizaciones sociales e individuos que simpatizan con el Proyecto Alternativo de Nación, aunque no militen o simpatizen con alguno de los partidos políticos que ahí se encuentran. Además, la función del FAP, señala el Presidente Legítimo, es la de oponerse al bloque de la derecha, representado principalmente por el PRI y el PAN, dando incluso nombre a estos dos bandos, que antaño eran conservadores y liberales, Andrés Manuel los llama ahora derechistas y progresistas.

La Presidencia Legítima

A este respecto, se puede decir que López Obrador asume la Presidencia Legítima fundamentalmente por dos razones, por una parte como un acto de resistencia civil pacífica que implica el rechazo al fraude electoral a la usurpación de la presidencia, a la violación de la Constitución, pero también como un compromiso con las generaciones futuras, con la Nación entera, pues la Presidencia Legítima representa la esperanza de transformar de manera efectiva la vida pública de México a través de la organización popular.

Glosario:

Democracia: Del griego demos, pueblo y kratos, fuerza, poder, autoridad. Régimen político en el que el pueblo participa en la organización del poder público y en su ejercicio. No debe limitarse únicamente a la elección de los gobernantes, uno de los conceptos más completos es el consagrado en el artículo 3 de la Constitución Mexicana, que establece que la democracia no solamente debe ser vista como una estructura jurídica y un régimen político, sino como un sistema de vida fundado en el constante mejoramiento económico, social y cultural del pueblo.

Estado de bienestar: La obligación del Estado de garantizar a sus habitantes el acceso a una serie de satisfactores materiales y culturales, que permitan a cada individuo su pleno desarrollo económico, social y espiritual.

Nación: Del latín natío – onis, conjunto de personas que tienen una tradición común. El concepto de Nación entraña la unidad de una colectividad de personas, por un pasado cultural común, es decir, el lenguaje, la raza, la religión, la historia, los usos y costumbres, pero además con una proyección a futuro que implica la solidaridad de grupo y el deseo de permanencia de la identidad cultural.

República: Del latín Res – Publica, Cosa – Pública. Éste término era utilizado en el Derecho Romano, Cicerón definía la República como la cosa del pueblo; entendiendo por pueblo, no cualquier agregado humano informe, sino una colectividad unida por las leyes y el interés común. En su acepción moderna, Maquiavelo concibe a la República como una forma de gobierno caracterizada por que el titular del Poder Ejecutivo (el Jefe de Estado y de Gobierno) es de duración temporal, y sin derecho a transmitir el cargo por propia selección o decisión, a la persona que lo suceda, de ahí que se oponga a este concepto el de Monarquía. Por su parte, los ideólogos de la Revolución Francesa establecieron que la República es el patrimonio económico, moral y cultural del pueblo, sin distinción de clases y que tiene como bases fundamentales el interés de la patria, la igualdad, el derecho y la justicia.

Soberanía: Del latín superanus, super: sobre, encima. Es la libre determinación del orden jurídico, el poder de decisión que no admite, tolera o reconoce a otro poder superior o por encima de él.

L.D. Jesús Palma
Ciudad de México, sede del Gobierno Legítimo, 20 julio de 2009.




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