La presencia de los estudiantes ha sido una constante después de que, sea dicho con verdad, el Movimiento Obradorista tuvo que espaciar su diaria presencia en el Zócalo Capitalino después de que uno de nuestros compañeros se vio delicado de salud, amén de las diversas actividades que se tienen por otros lares y que suelen ser absorbentes.
Con todo, nuestros camaradas universitarios han logrado mantener la vigencia de la solidaridad de los diferentes movimientos sociales con su sola presencia, siendo conocido hoy en día ese espacio como la Carpa Obrado-Estudiantil-Rudo-Smeíta... más los que se quieran seguir sumando. Para mí sí es un hecho alentador que a otros les quede claro que sí: todos cabemos en esta lucha sin ponernos 'peros' de por medio.
He sido testigo fiel (aunque no tan constante) del trabajo que les está costando a los estudiantes universitarios lograr involucrar a sus propios camaradas, sin embargo, ahí están y a pesar de sus propios descalabros (como todos lo hemos vivido en este caminar en donde tratamos de unificar esfuerzos ciudadanos), o asambleas fallidas y sin quorum suficiente, ellos no dejan de intentarlo. Y así, poco a poco, si ayer veía a 8 estudiantes, hoy vi cerca de 20... y siguen siendo pocos, es cierto. ¡Vaya que cuesta trabajo! y aún así: en su constante intentarlo, los estudiantes demuestran que también pueden formar parte de la resistencia (y la terquedad y la constancia y el volverlo a intentar y la fuerza de voluntad).
Siendo que generalmente me gusta ver, escuchar, callar (no soy de mucha palabra hablada) y analizar todo lo que acontece a mi alrededor, no descubro el hilo negro al constatar que efectivamente, sea un movimiento político-social, sea un movimiento gremial, o sea un movimiento estudiantil, siempre nos costará esfuerzo lograr que otros hagan el esfuerzo y se sumen. Uno de los estudiantes comentaba la tarde de hoy que recordaba la gran cantidad de gente que salió a marchar aquel 15 de octubre del 2009 para mostrar su apoyo al SME justo unos días después de la ilegal ocupación de sus instalaciones. Por supuesto, él enfocó su comentario hacia la gran cantidad de estudiantado que salió a marchar aquella tarde. Así suele pasar: muchos jalamos al principio, quizá movidos por la espontaneidad, quizá por el enojo y la indignación del momento, pero no todos nos quedamos para continuar. La constancia cuesta, esto lo pueden también confirmar los SMEítas que siguen en pie de lucha, mismos que no llegan ni a la mitad de los originales 44,000 que fueron despojados de su trabajo. Ni hablar: llegaremos al final los que debemos ser y estar y puesto que si bien es cierto que las manifestaciones pareciera que no hacen mella en las putrefactas instituciones, también es cierto que las mismas son aliciente para todos aquellos que parecieran olvidados y abandonados a su suerte. Por ello el estudiantado universitario se pronunció hoy frente a la ICJN (Ínfima Corte de Justicia de la Nación) respecto a la situación de nuestros camaradas del SME.
Y sí... al día 80 de esta huelga de hambre del SME, el Ing. Cayetano se mantiene en huelga de hambre y su estado de salud se sigue deteriorando. ¡Qué duro es ser testigo y no poder hacer más! En ocasiones la impotencia es tal, que ni documentar todo esto pareciera ser suficiente.
Las imágenes de esta tarde:
Y la manifestación en la Ínfima...
La lectura del pronunciamiento estudiantil en torno al caso del SME después de la resolución de la Ínfima Corte...
Y los pronuncimientos diversos: del SMEíta liquidado que resiste, el SMEíta jubilado, el habitante de Atenco, el miembro del PRT, la joven estudiante de Filosofía y Letras, en fin: diversas voces...
*****
* El colofón: ¿Que cuesta que la gente se involucre?, ¡claro que cuesta! Después de que me llegara por correo electrónico el Boletín de Prensa del SME hablando del estado de salud en el que se encuentra a estas alturas el Ing. Cayetano, tuve la ocurrencia de enviarlo ayer a gente a la que usualmente no suelo hacerlo, dado su nivel de indiferencia y apatía. Puesto que la imagen que muestra dicho Boletín es impactante, pensé (suelo ser un poco ingenua) que quizá por la sola imagen movería algo en esas personas, pero una vez más me equivoqué. Hoy que las vi no comentaron absolutamente nada al respecto, antes bien encontré a tres de esas personas ensimismadas, hablando de los temas trascendentales que se encuentran en una TVNotas.
Sin comentarios...
Con todo, nuestros camaradas universitarios han logrado mantener la vigencia de la solidaridad de los diferentes movimientos sociales con su sola presencia, siendo conocido hoy en día ese espacio como la Carpa Obrado-Estudiantil-Rudo-Smeíta... más los que se quieran seguir sumando. Para mí sí es un hecho alentador que a otros les quede claro que sí: todos cabemos en esta lucha sin ponernos 'peros' de por medio.
He sido testigo fiel (aunque no tan constante) del trabajo que les está costando a los estudiantes universitarios lograr involucrar a sus propios camaradas, sin embargo, ahí están y a pesar de sus propios descalabros (como todos lo hemos vivido en este caminar en donde tratamos de unificar esfuerzos ciudadanos), o asambleas fallidas y sin quorum suficiente, ellos no dejan de intentarlo. Y así, poco a poco, si ayer veía a 8 estudiantes, hoy vi cerca de 20... y siguen siendo pocos, es cierto. ¡Vaya que cuesta trabajo! y aún así: en su constante intentarlo, los estudiantes demuestran que también pueden formar parte de la resistencia (y la terquedad y la constancia y el volverlo a intentar y la fuerza de voluntad).
Siendo que generalmente me gusta ver, escuchar, callar (no soy de mucha palabra hablada) y analizar todo lo que acontece a mi alrededor, no descubro el hilo negro al constatar que efectivamente, sea un movimiento político-social, sea un movimiento gremial, o sea un movimiento estudiantil, siempre nos costará esfuerzo lograr que otros hagan el esfuerzo y se sumen. Uno de los estudiantes comentaba la tarde de hoy que recordaba la gran cantidad de gente que salió a marchar aquel 15 de octubre del 2009 para mostrar su apoyo al SME justo unos días después de la ilegal ocupación de sus instalaciones. Por supuesto, él enfocó su comentario hacia la gran cantidad de estudiantado que salió a marchar aquella tarde. Así suele pasar: muchos jalamos al principio, quizá movidos por la espontaneidad, quizá por el enojo y la indignación del momento, pero no todos nos quedamos para continuar. La constancia cuesta, esto lo pueden también confirmar los SMEítas que siguen en pie de lucha, mismos que no llegan ni a la mitad de los originales 44,000 que fueron despojados de su trabajo. Ni hablar: llegaremos al final los que debemos ser y estar y puesto que si bien es cierto que las manifestaciones pareciera que no hacen mella en las putrefactas instituciones, también es cierto que las mismas son aliciente para todos aquellos que parecieran olvidados y abandonados a su suerte. Por ello el estudiantado universitario se pronunció hoy frente a la ICJN (Ínfima Corte de Justicia de la Nación) respecto a la situación de nuestros camaradas del SME.
Y sí... al día 80 de esta huelga de hambre del SME, el Ing. Cayetano se mantiene en huelga de hambre y su estado de salud se sigue deteriorando. ¡Qué duro es ser testigo y no poder hacer más! En ocasiones la impotencia es tal, que ni documentar todo esto pareciera ser suficiente.
Las imágenes de esta tarde:
Y la manifestación en la Ínfima...
La lectura del pronunciamiento estudiantil en torno al caso del SME después de la resolución de la Ínfima Corte...
Y los pronuncimientos diversos: del SMEíta liquidado que resiste, el SMEíta jubilado, el habitante de Atenco, el miembro del PRT, la joven estudiante de Filosofía y Letras, en fin: diversas voces...
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* El colofón: ¿Que cuesta que la gente se involucre?, ¡claro que cuesta! Después de que me llegara por correo electrónico el Boletín de Prensa del SME hablando del estado de salud en el que se encuentra a estas alturas el Ing. Cayetano, tuve la ocurrencia de enviarlo ayer a gente a la que usualmente no suelo hacerlo, dado su nivel de indiferencia y apatía. Puesto que la imagen que muestra dicho Boletín es impactante, pensé (suelo ser un poco ingenua) que quizá por la sola imagen movería algo en esas personas, pero una vez más me equivoqué. Hoy que las vi no comentaron absolutamente nada al respecto, antes bien encontré a tres de esas personas ensimismadas, hablando de los temas trascendentales que se encuentran en una TVNotas.
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